17 diciembre 2009
A este paso, experta en terremotos
15 diciembre 2009
Magosto en Balboa
Pallozas en Balouta, región de los Ancares (León).
Palloza de O Cebreiro (Lugo). Actualmente utilizadas para refugio de los peregrinos camino de Santiago de Compostela.
Interior de una palloza-museo en (creo recordar) Piornedo (Lugo).
En cuanto a la fiesta, el plan era que grupos de música celta de distinta procedencia se turnarían en conciertos desde las 8 de la tarde hasta las 2 de la mañana. Pues bien, el primer día llegamos a Balboa sobre las 9:30 de la noche y aquello estaba… pelín muerto. Había gente, sí, pero nada que hiciera suponer que aquello era una fiesta. Grupitos de amigos tomando cañas por un lado, gente cenando en las mesas de
Cuando llegamos allí nos encontramos con un hórreo de madera (no como los de Galicia que son de piedra) y una palloza aún más grande que la anterior, pero con todavía menos gente.
Después de tomarnos algo allí y teniendo una bola de castañas en el estómago, le pregunté a la camarera por la dichosa fiesta:
- ¡Ah, pues es que yo también soy nueva aquí! Pero mi jefe me ha dicho que se animará esto sobre las 2 de la mañana…
Ahí iba a estar yo esperando hasta las tantas a que unos tíos terminaran de enchufar cables y que la gente quisiera llegar a llenar la palloza (sobre todo con el cansancio de haber estado todo el día visitando León y Ponferrada). Nos volvimos a bajar a
Al llegar de nuevo a la primera palloza nos dimos cuenta de que algo había cambiado. ¡Había música en directo! Nos hicimos con otra bebida y un par de sillas y ya estábamos listas para disfrutar del espectáculo. Pero el espectáculo fue ver a unos cuantos tiarrones vestidos con chalecos hechos de peluche, falditas y las canillas al aire porque lo que fue el concierto duró bastante poco: Tres o cuatro canciones a base de gaitas y panderetas y unos cuantos espectadores ansiosos de fiesta bailando y pegando brincos y se acabó.
Parece ser que en unos minutos iba a tocar otro grupo pero mi amiga y yo decidimos que ya era hora de irse a la camita. La fiesta nos había decepcionado.
08 diciembre 2009
De puente a puente y escribo porque ya toca
Es curioso que hace dos meses comencé este blog aprovechando un puente que pasé en casa y en el que estaba más aburrida que una ostra; hace un mes hubo otro puente en el que no escribí porque no estuve en casa y, hoy, estando again de puente (aunque para mí no lo ha sido pues me ha tocado trabajar), vuelvo a aprovechar para escribir. Como en su momento no lo hice y alguno ya me reprochó (y vaticinó) que podía sentarse a esperar tranquilamente para enterarse de mi escapada, os relataré ahora un poquito de a lo que me dediqué durante el puente de
Creo que fue el último día que asistí porque encontrar a nativos no españoles era una tarea cada vez más ardua y no le veía mucho sentido a estas “sesiones”. Pero esta vez hubo algo que me traje a casa: un papelajo con una recomendación que un leonés me hizo (en inglés, eso sí):
El dichoso papelito ha estado meses y meses y meses encima de mi mesa sobreviviendo a esporádicas limpiezas profundas de papeles acumulados esperando a ser leídos, clasificados o, simplemente, ser tirados a la basura.
Pues bien, hace un par de semanas una amiga y yo conseguimos poner de acuerdo nuestras agendas y quedamos para tomar algo a la salida del trabajo. Nos conocimos hace ocho años en Oxford y en todo este tiempo sólo nos habíamos visto dos veces. ¡Dos veces en ocho años! Y vivimos en la misma ciudad… No hay excusas, ¡no tenemos vergüenza!
Después de ponernos al día de nuestras respectivas vidas, empezamos a hablar de hacer una escapada juntas y en esto que vino a mi mente el famoso papelito recordatorio de la fiesta de Balboa.
Propuse irnos a por unas cuantas castañas a León y ante la aceptación de la idea, allá que nos lanzamos a buscar alojamiento por la región de El Bierzo.
El resultado fue que la primera noche la pasamos en el Hostal Parador de San Marcos de León. Ná, un hotelito de mala muerte (tan solo 5* Gran Lujo)…
No es que seamos ricas pero aprovechamos la oferta “Tarifa única” de Paradores, que deja la habitación doble a un precio muy asequible. Nos dimos el capricho y pernoctamos en el parador más caro de España (junto con el de Santiago de Compostela).
Tras visitar la ciudad de León (de la que ya hablaré en otro momento), nos fuimos hacia el Oeste de la provincia leonesa y nos aposentamos en el Hotel Ambasmestas. Un sitio muy cuco de turismo rural que nos hizo de campamento base para el fin de semana.
Y como esta introducción ha quedado suficientemente larga como para no ser una introducción, a pesar de tener que haber publicado esta entrada hace semanas (cuando la escribí) y aunque lo hago hoy con mucho retraso y sentimiento de culpa, será otro día cuando os cuente a qué es a lo que fuimos a las tierras bercianas. ¡¡Buenas noches!!
07 diciembre 2009
Preparada con un casco y unas cuantas tiritas
Vuelvo a dar señales de vida por el mundo bloguero para plantearos una cuestión por la que seguramente me caigan unas cuantas piedras a la cabeza.
Una vez dijo alguien que la crisis afecta más a aquellos que siempre han tenido dinero porque se encuentran con que no tienen trabajo y tampoco pueden vender ninguna de sus miles de posesiones (mansiones, yates, coches, joyas…) porque no hay nadie que se arriesgue a comprar. Animalitos, tendrán que posponer unos meses sus vacaciones en las Seychelles o comprarse un Porsche que corra un poco menos… Mientras, los pobres están acostumbrados a sobrevivir y a hacer malabarismos con la nómina. ¡Válgame dios! ¡Cuánto revuelo por unos cuantos pobres!
En fin… Está claro que no estoy a favor de la opinión de esta individua pero ¿qué pensarías de alguien que, en estos momentos de debilidad económica, puede darse con un canto en los dientes por que tiene trabajo pero, a la vez, sólo espera a que la despidan para poder cobrar la indemnización y el paro que la permitan escapar en busca de algo mejor?